Evaluando creencias Sobre el Futuro, Relaciones, Dinero Y Salud

Introducción

En los dos últimos años he pensado mucho en el futuro, sobre todo en los aspectos personal, profesional y económico. Ni siquiera sé si esto es bueno, soy consciente de esas famosas frases de sabios que aseguran que la preocupación por el futuro te hace descuidar el hecho de disfrutar del presente, pero si no piensas en el futuro para que ahorrar, para que ser buena persona o cuidar tus relaciones sociales o para que esforzarte en mejorar tu empresa si nada de esto va a importarte, bueno, seguramente todo se trata de la medida en la que te preocupe o mejor dicho, te ocupe.

Un temible o amado futuro

Puede que dentro de unos años lea esto y me descojone de lo loco que estaba pero, si pienso en el futuro, hoy no quiero tener un futuro lleno de aventuras ni negocios caros o difíciles de mantener, tengo tanto estrés negativo diario por trabajo y preocupaciones que mis pensamientos de un futuro ideal hoy en día podrían ser vivir con una mujer preciosa y comprometida con una forma de vida sostenible y práctica, tener una bonita casa en el campo o en la montaña y una vida tranquila y contemplativa o incluso tener animales y sobrevivir de mi propia cosecha, disfrutar de haber trabajado duro hoy para mañana tener activos rentables que me permitan tener una vida cómoda y por supuesto nada ostentosa. Sencillez y practicidad.

La idea de vivir en una bonita casa en el campo choca directamente con la idea de vivir viajando de forma minimalista y práctica que también me planteo. Fantaseo y sueño con ambas ya que ambas opciones me resultan atractivas pero hoy dejo esta elección a que dependa de cuanto acumule y de cuanto lleguen a valer Bitcoin y Ethereum a lo largo de los próximos 15 años o de lo que pueda llegar a cambiarme la vida.

Una forma de ganarse la vida

Si hoy me preguntan a que me quiero dedicar en 20 años o cual sería la empresa de mis sueños con la que podría trabajar hasta jubilarme o incluso resistirme a esa idea (jubilarme) creo que la respuesta sería: Ninguna.

He tenido pocas cosas claras en la vida, dos o tres, y una sin duda es que aún respetando muchísimo a mi padre como educador, persona y padre, yo no voy a trabajar hasta que tenga suficiente edad para delegarlo a un hijo que hoy ni siquiera tengo pensado tener ni voy a aferrarme a la idea de controlar un negocio cada día para tener algo importante o interesante que hacer con mi vida.

Voy a trabajar lo suficientemente inteligente durante los próximos 15 años para que las semillas que plante trabajen para mi el resto de mi vida de cara a un futuro que quiero pensar estará replento de activos bien diversificados si mi gestión de la vida sigue siendo adecuada y nada se me tuerce demasiado.

Las oportunidades y los trenes que pasan

Creo en mi capacidad de aprovechamiento de las oportunidades que me ha dado la vida, también creo en que mantendré mi buen criterio sobre las que me puedan surgir en un futuro, es algo que no me agobia hoy por que estoy centrado en seguir aprendiendo y cogiendo los trenes que pueda permitirme.

La forma de relacionarme con los demás

Este punto es uno de los que más quebraderos de cabeza me ha dado en los últimos años, me encantan y me esfuerzo en comprender conceptos de filosofía de vida y de psicología humana pero las relaciones humanas son tan complicadas a medida que cumples años y te vuelves mas selectivo que es sin duda de lo más difícil de enfrentar.

Creo que estudiar y profundizar en esta sabiduría es estar cada vez mas en lo cierto sobre que cosas estas dispuesto a tolerar y cuales otras no. Aprender a dejar de lado a personas que crees que estarían para siempre o darte cuenta que las amistades y la familia tienen otros conceptos de la lealtad y amor que tu tienes tan arraigados y has mamado y creído durante años es duro. Es frustrante aceptar que todos somos imperfectos y cuestionarte una y otra vez tus creencias por miedo a no herir o a que piensen que eres egoísta es agotador.

Cada día que pasa estas mas solo, tienes que trabajar mas en no enfadarte y cada día debes aprender a tranquilizarte, tomar aire y redirigir tus pensamientos hacia cosas menos frustrantes y mas empoderantes para que no te hagan daño. No puedo dejar de pensar en que todo el mundo es egoísta y que centrarse en hacer el bien a los demás constantemente sin pedir nada a cambio puede que no sea mi camino o puede que no esté aún preparado para aceptar que no puedo cambiar esta realidad.

Mi forma de entender las finanzas

Creo que la sabiduría financiera adquirida en los últimos dos años me ha servido para darme cuenta de verdad de lo importante que es saber administrar el dinero, aprender la importancia de ahorrar e invertir y poder trazar un plan para que llegado el momento pueda disfrutar de verdad de una buena vida siendo aún joven ha tomado para mi una importancia vital y en lo que estoy enfocado en estos últimos meses.

Aprender sobre dinero, sobre sus posibilidades, y sobre diversas formas de inversión y sus conceptos me es ahora divertido e instructivo, he cometido errores y aciertos, pero arriesgar tras aprender y ver como da frutos me hace crecer (como a mis ahorros).

A veces quiero enseñarle a algunos amigos lo que he aprendido y me doy cuenta que no es tan fácil. Que tal vez a cada uno le llega su momento en el necesita aprender sobre estos temas, o que tal vez hay a quien no le llega nunca, o quien directamente no le interesa. Esto me apena, pero ya que no puedo controlarlo, solo puedo centrarme en mi aprendizaje, ayudar a quien lo necesite si pide consejo y no hacerlo con quien no lo pide.

Cuidando mi salud

Cuando de forma irónica le digo a mis amigos que voy al gym para estar bueno desnudo no estoy mintiendo, al menos no del todo, ya desde que empecé a cuidar mi físico y mi alimentación entiendo cada vez mas el concepto de salud si hablamos de salud física.

Hay demasiada gente que va por la calle asfixiándose por que no dejó de fumar a tiempo o con tripas a las cuales les cuesta mantener la espalda recta por que no cuidaron en su momento de su alimentación. Soy consciente de todo esto y de que no quiero acabar así, no quiero jubilarme joven con una salud de mierda para no poder disfrutar de una buena escapada de senderismo, desde hace bien poco disfruto con los retos físicos, me gusta como ha evolucionado mi cuerpo con el entrenamiento aunque se que con mi metabolismo no puedo exigirme mucho mas sin sacrificar un capricho culinario, o dos. Ni una buena cerveza, o dos.

Quiero verme bien y gustarme y estar fuerte y ser capaz de cualquier esfuerzo físico que pueda plantearme. Seguir mejorando y alimentándome de forma saludable es otra de mis formas de inversión a largo plazo 🙂

Gracias por leer.

Gato.Kaizen